El
Banquete ha sidó calificado por la inmensa mayoría de
sus estudiosos como la obra maestra de Platón y la perfección suma de su arte.
Es posiblemente el diálogo platónico más ameno y el más identificado con el
espíritu de su tiempo. Es también la más poética de todas las realizaciones
platónicas, en la que difícilmente los aspectos literarios pueden separarse de
la argumentación filosófica, lo que hace que nos encontremos ante uno de los
escritos en prosa más completos de toda la Antigüedad y una de las más
importantes obras literarias de toda la literatura univesal. En este diálogo,
literatura y filosofía son justamente la misma cosa: una composición original
en la que la filosofía toma cuerpo en la realidad, mientras que la visión de
la realidad es enteramente transformada por la filosofía .
Combina la pintura de las situaciones rica en detalles y la expresión de los
problemas filosóficos más difíciles con el más alto refinamiento compositional. Tal
vez por ser el diálogo de Platón más brillante es precisamente el que peor
entendido ha sido de todos sus escritos. Esta cadena de malos entendidos la
inició ya Jenofonte, quien veía en nuestro diálogo un tratado de la pasión
amorosa, y de ahí que en su obra homónima se proponga elogiar los placeres de
la vida matrimonial .
Decimos
«banquete», pero en realidad los acontecimientos que relata este diálogo
tienen lugar después de la comida, en el momento justo de la bebida o
«simposio» propiamente dicho. Sympósion es el título griego que figura
para este diálogo y que adoptan también algunos traductores modernos,
especialmente anglosajones, que nosotros hemos preferido evitar por sus
connotaciones actuales. Por los demás, el propio Platón habla de synousía «reunión»,
deîpnon «comida», sýndeipnon «convite», pero nunca de sympósion.
Cf. D. BABUT, «Peinture et dépassement de la réalité dans de Banquet de Platon», REA 82 (1980), 5-29, esp. pág.
29.
Sino sabes como descargar el libro, te dejo un turorial AQUI
No hay comentarios:
Publicar un comentario